Reciclaje vegetales

El tratamiento y valorización de residuos orgánicos se basa en un  proceso de secado mecano-térmico mediante el cual se transforma, en cuestión de minutos, el residuo en un material seco, estable química y microbiológicamente, de volumen y peso hasta 10 veces menor que el original y apto para posteriores aprovechamientos como abono orgánico, combustible o como alimento para el ganado, piensos.

El proceso consiste, básicamente, en una reducción del tamaño del residuo mediante trituración (posible extrusión) y posterior secado térmico, especialmente diseñado para materiales tan heterogéneos y críticos en su tratamiento como lo son los residuos orgánicos en general y particularmente los residuos de mercado de frutas y verduras.

Esta tecnología abarca el tratamiento de la fracción orgánica de residuos sólidos. Si el residuo a tratar no es 100% orgánico como el proveniente de la recogida doméstica ordinaria, etc., es necesario aplicar previamente, un proceso de selección y separación de materiales inorgánicos según un sistema convencional.